Tres meses fantásticos que duraron lo suficiente…
A veces, mientras lees un post inicial, ya estás esperando «el artículo que sabías que iba a llegar». De hecho, a veces mientras escribes ese post ya estás esperando ese próximo artículo. Tomo nota. Porque sí, han sido tres meses fantásticos con el Jaguar, pero se acabó la fiesta.
¿Por qué? Pues te lo puedo decir. Porque aunque el coche funcionaba el 99% del tiempo, la sensación de que me podía dejar tirado en cualquier momento del día no me ponía muy de los nervios. O al contrario, depende de cómo se mire.
Así que decidí cambiar el Jaguar por otra cosa. Algo japonés, nuevo, sin gran motor y sobre todo muy sensato.
¡NO, CLARO QUE NO! Porque un burro no tropieza dos veces en la misma piedra, yo sí. Con amor y placer incluso. Después de todo, ¡no soy un burro!
De lo que compré entonces hablaremos más adelante. Primero, unas palabras sobre mis experiencias con The Golden Coach. Y la verdad es que son bastante buenas, aunque uno no se lo espere. Un consumo medio de 8,8 litros cada 100 kilómetros, arrancar y andar cada mañana y un confort sin igual son las cosas que se me quedaron grabadas.
Oh sí, por supuesto también que bebió tanto refrigerante como cerveza André Hazes en sus mejores días, dejaremos sin mencionar. Y también esa mañana que todo el refrigerante restante vertió con fuerza, dejaremos de lado.
Aunque ese pequeño incidente fue la razón para decir adiós al viejo británico. Después de tres meses fantásticos por cierto. Porque un coche que te abandona es k*t y esto me presionó al hecho de que esto podría suceder más a menudo.
Y sí, lo sabía, porque eso es lo que hacen los viejos coches ingleses. Pero aún así, a veces el amor es más fuerte que el realismo, y aparentemente soy un maestro en eso. En varios niveles, pero esto tampoco viene al caso.
El Jaguar fue canjeado por una cantidad sólo ligeramente inferior a lo que yo mismo pagué por él. Asumo esa pérdida de 500 euros como un hombre, porque los tres meses de placer que me proporcionó el V8 valieron mucho más que eso. Y también puedo tachar de la lista el haber sido propietario de un Jaguar XJ8. Ya lo he hecho.
Y ahora la pregunta; ¿qué coche ha ocupado su lugar entonces? No te lo voy a decir aquí, prefiero hacerlo primero en el Podcast de Blog de coches. El cual puedes escuchar muy fácilmente, por cierto.
La descripción detallada del nuevo rayo plateado llegará la semana que viene. Pero me quito el sombrero de antemano; aunque sea incluso más antiguo que el Jaguar, ¡tengo mucha más confianza!
Con un poco de suerte, dentro de tres meses, todavía daré con un «rop av glädje».
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